noviembre 19, 2011

mi objeto de amor primario

Duelo.
Suena a que duele. Mucho.
Amor, odio, culpa, reparación.
Todavía estoy en el odio. Hace tres meses que me quedé ahí.
¿Cuánto tardan estas cosas? ¿Cuántos sueños con tu cara en ellos tengo que soñar? ¿Cuántas autocharlas? ¿Cuántas lágrimas frente al espejo?
Todo se volvió un poco complicado. Todo tiene un fondo que se va hasta el allá y entonces.
Gracias por tanto, pero en este momento estoy enojada con vos.
Porque te fuiste, así como si nada. Nos dejaste. Me dejaste.
No es tu culpa, jamás lo fue ni lo va a ser. Pero no puedo evitar odiarte en este momento.
En algún momento podré hablarlo tranquila, podré nombrarte sin que sea un chiste, verte en mis sueños sin despertarme nerviosa.Quizás, algún día. Mientras tanto me harás falta.

No hay comentarios: